Módulo 3

 

1. Presentación de la Política elegida.

 

El Consejo de ministros ha aprobado el Real Decreto por el que se aprueba el Protocolo de actuación frente al acoso sexual y acoso por razón de sexo en el ámbito de la Administración General del Estado (AGE) y de sus organismos públicos.

(https://www.boe.es/eli/es/rd/2024/03/08/247)

 

Respecto a su ámbito de aplicación, el protocolo se aplicará a todo el personal de la Administración General del Estado y de los organismos públicos y también a las personas que prestan servicios o colaboran con la AGE o con algunos de sus organismos, como las personas en formación, las que realizan prácticas no laborales, etcétera.

 

El objetivo general del protocolo es evitar las posibles situaciones de acoso sexual y acoso por razón de sexo en la Administración General del Estado y en los organismos vinculados o dependientes de la misma, y afrontarlas de manera efectiva en caso de que éstas lleguen a producirse.

 

Entre los principios que consagra el Protocolo está el de la obligación de los empleados públicos de poner en conocimiento los casos de posible acoso sexual o acoso por razón de sexo que conozcan, para lo que debe establecerse un mecanismo sencillo y confidencial; la obligación para la administración de atender y tramitar, en su caso, las notificaciones que reciba sobre supuestos de acoso sexual o acoso por razón de sexo, en el ámbito de su competencia, garantizando que sus actuaciones no desprotejan a la víctima; y la necesidad de acometer las actuaciones con celeridad, garantizando -salvo excepciones justificadas- que se elaborará un informe sobre el caso en un plazo no superior a 10 días desde la comunicación o solicitud de activación del protocolo.

 

2. Análisis la política pública elegida.

Sin ninguna duda el RD 246/2024 tiene un impacto significativo en los roles de género, dado que contribuye a combatir una de las manifestaciones más comunes de desigualdad de género, como es la violencia sexual en el entorno laboral. La implementación de un protocolo claro para denunciar y actuar frente al acoso otorga a la mujer una herramienta legal e institucional con la que defenderse, lo que debería contribuir a su seguridad y empoderamiento en el ámbito laboral.

 

Considero que este RD en teoría otorgará a las mujeres mayores recursos legales y herramientas para garantizar su seguridad y comodidad en la administración lo que por culpa de las situaciones de acoso puede limitar la igualdad de oportunidades y las condiciones laborales de las mujeres en general y no sólo de las víctimas.

 

Por lo tanto, el tener más herramientas legales para proteger a la mujer puede afectar directamente a la cantidad y calidad de la representación femenina en la ADMINISTRACION General del Estado.

 

3. Posible Impacto de este Real Decreto

 

Creo que podría tener un impacto positivo en varios factores:

1.- En la seguridad y bienestar laboral.

2.- En la igualdad de género.

3. En la percepción legal y confianza de las instituciones.

4. Un impacto legal reforzando el marco normativo.

5. Me resulta un poco feo añadir este punto, pero en un ambiente de trabajo más seguro e igualitario también habría una mejora en la productividad, aunque este es el punto menos importante a tener en cuenta y lo último que debería perseguir esta clase de política.

 

4. Puntos fuertes y debilidades.

 

El problema de base de estás políticas es que es muy difícil tramitar una queja por acoso sin tener la seguridad de que esta llegue a buen puerto y de manera efectiva y que no ponga en peligro el bienestar en el puesto de trabajo de la víctima. Como empleado de la AGE a menudo escucho a compañeras un montón de historias de acoso encubierto o comentarios que en una Administración Pública jamás deberían permitirse. Pongamos el ejemplo, una funcionaria recién incorporada a su puesto de trabajo donde su jefe de avanzada edad entre un montón de comentarios de bienvenida estrambóticos le deja caer un comentario tal como:

-Vente al despacho que vamos a practicar “el” sexo.

Como esta dicho en tono jocoso, aunque jamás debería de haberse pronunciado la victima decidirá dejarlo pasar, dado que no tiene garantías de que el proceso la vaya a mantener a salvo, sin embargo, de denunciar se abrirá un proceso en el que ella será señalada y no tendrá ninguna garantía de que ese individuo vaya a ser separado de su puesto de trabajo y que no vaya a tener que seguir trabajando con él y viéndolo a diario.